El proyecto fue desarrollado en conjunto con el Estudio SEPRA y Sánchez Elía, priorizando la calidad constructiva y el cuidado en cada detalle de terminación. Se destacan los ascensores de primer nivel, los palieres y accesos amplios con pisos de mármol, los exclusivos pisos de madera y placards con espejos integrados.

La fachada combina ladrillos a la vista con techos metálicos verdes a dos aguas, aportando una identidad arquitectónica única. El complejo residencial cuenta además con un Club House y completas instalaciones deportivas de uso común, pensadas para potenciar la vida social y recreativa de sus residentes.